Para todos aquellos que estén planeando viajar a Japón con niños, puede parecer que es una tarea difícil. Sin embargo, Japón es un destino seguro, lleno de actividades para disfrutar en familia, que encantarán tanto a los más pequeños como a los adultos. A continuación, encontrarán algunas recomendaciones de viaje y lugares que pueden disfrutar juntos.
Una de las formas más cómodas y convenientes de desplazarse por Japón es utilizando los trenes, ya que son muy seguros y conectan gran parte de las ciudades. Además, la mayoría de los pases ofrecen tarifas especiales para niños menores de 12 años. Una recomendación al usar los trenes es evitar las horas pico: por la mañana, de 7:00 a 9:00, y por la tarde, de 17:00 a 19:00. Otra opción igualmente conveniente para viajar con niños es el uso de los autobuses, que, al igual que los trenes, ofrecen tarifas diferenciadas y conectan una amplia variedad de zonas en la ciudad.
Con respecto al hospedaje, es importante verificar las políticas del hotel antes de reservar, ya que cada establecimiento tiene sus propias normas sobre la estancia de niños. En el caso de hospedaje tradicional, como los “ryokan” o “minshuku”, estos suelen incluir las comidas en el precio del alojamiento. Por lo tanto, es importante confirmar estos detalles con el alojamiento para que puedan calcular las tarifas para niños, las cuales pueden variar según la edad y el tipo de comida que se requiera.
La mayoría de los restaurantes en Japón son acogedores para quienes viajan con niños. Sin embargo, los más adecuados son los restaurantes familiares y/o las cadenas de restaurantes, ya que muchos de ellos incluyen menús infantiles en su carta y disponen de espacios adaptados para los más pequeños. Un aspecto destacable es que, generalmente, estos restaurantes indican los ingredientes de los platillos, lo que los hace una opción segura para quienes tienen alergias alimentarias.
En Japón, cada vez es más común encontrar cambiadores en los baños públicos. Existen numerosos baños gratuitos disponibles en centros comerciales, tiendas departamentales, estaciones de tren e incluso en algunas tiendas de conveniencia. Cabe destacar que la lactancia materna está permitida en espacios públicos; sin embargo, para mayor comodidad y privacidad, muchos de estos lugares también ofrecen cabinas especiales para madres lactantes, además de áreas con cambiadores.
Una de las actividades más populares en Japón son los baños termales, conocidos como “Onsen”. Estos se encuentran en todo el país, y mucho alojamientos los incluyen como parte de sus servicios. Además, existen onsen de uso privado, aunque suelen tener un costo más elevado. Es importante tener en cuenta que los niños que aún usan pañales no deben entrar a las aguas termales. También, se debe considerar que la temperatura del agua puede ser demasiado alta pra los niños pequeños. En general, los baños termales están separados por sexo, aunque los niños pequeños pueden acceder a las instalaciones del sexo opuesto, generalmente hasta los 6 años, aunque esta edad puede variar según el lugar.
En Japón también existe la opción de solicitar el servicio de un experto en el cuidado de los niños para aquellos que así lo requieran o en caso de realizar una actividad en donde no se permita el acceso a los más pequeños. A continuación daremos ejemplos de lo que pueden hacer en estos casos.
Distintos hoteles ofrecen servicio de niñera para aquellos que deseen pasar un tiempo a solas o quienes deseen realizar alguna actividad donde no se permitan niños. Para estos servicios es importante revisar en el hotel a reservar que cuenten con dicho servicio y los posibles costos que estos tengan.
gualmente se puede solicitar servicio de niñeras profesionales, las cuales son bilingües, principalmente inglés, y acuden al hotel o lugar de estancia. Algunas de las opciones que se pueden encontrar en Japón son: